Hola a todas y todos! Mi nombre es Claudia y estoy haciendo mi voluntariado en una escuela bosque en Kembs, Francia, llamada Tzama.
Se trata de un colegio que tiene una metodología activa, en la que las actividades al aire libre forman parte de la rutina, independientemente del temporal. Al menos un 50% del día los dedicamos a estar en el bosque, en el jardín pedagógico o en instalaciones exteriores, donde la naturaleza se encuentra como la base de la educación.
Mi tarea es el acompañamiento a los niños y niñas de infantil (3-6) y primaria (6-12), el apoyo a las maestras en las actividades que se realizan sobre todo fuera y preparar juegos sobre temáticas relacionadas con el medio ambiente, música o inglés.
Llevo aquí alrededor de dos meses y primeras sensaciones son bastantes positivas. Considero que esta experiencia me está dando una formación en una pedagogía en la que me gustaría formarme en un futuro, estoy aprendido un idioma nuevo, estoy conociendo mucha gente nueva y me estoy enriqueciendo de todas las experiencias de cada día.
Estamos cuatro voluntarios en esta asociación, de los cuales, tres de nosotras vivimos juntas en Mulhouse, una ciudad cerca del pueblo en el que trabajamos. Tenemos muy buena relación con diferentes personas voluntarias y el ambiente es muy bueno, lo cual facilita mucho el sentirse como en casa.
Por supuesto no todo ha sido fácil, para mi el francés es una lengua casi nueva, ya que la di en el colegio, pero prácticamente todo se me había olvidado. Está siendo complicado el comunicarme con las niñas y niños, así como con algunas personas del profesorado, pero siento que poco a poco voy comprendiendo más y me hago entender. Por otra parte, toma tiempo acostumbrarte a un lugar completamente nuevo, pero la actitud y las ganas de hacer las cosas, hacen que todo se facilite.
En definitiva, hacer el voluntariado en mi opinión es 100% para todas esas personas que busquen nuevas experiencias, salir de la zona de confort y por supuesto, poner su granito de arena en la sociedad.